jueves, 5 de marzo de 2015

Tailandia gastronómica

Tailandia es uno de los destinos turísticos más visitados del mundo. Y no es para menos. Sus templos, sus parques naturales y sus playas, sobre todo sus playas, se encuentran en el primer nivel del ranking mundial. Y entre sus atractivos también merece una mención especial  su gastronomía. Siendo un país asiático, donde como no predomina el arroz y los noodles, dispone de una amplia oferta de comida, sobre todo gracias a los puestos callejeros, donde se puede degustar una gran variedad de platos por muy poco dinero.

Puesto de comida en el mercado nocturno de Ayyuthaya.


El plato estrella de Tailandia es, sin duda, el Pad Thai. Se trata, como bien recoge la wikipedia, de un plato salteado en wok (stir-fried) a base de fideos de arroz con huevos, salsa de pescado, salsa de tamarindo, pimiento rojo, tofu en daditos, brotes de soja y gambas o pollo, decorado con cacahuetes picados y cilantro. Se sirve habitualmente con una rodaja de lima, que se exprime y se añade al plato como condimento. Su precio va desde los 35 baths (1 euros)  a 150 baths. Se cocina en apenas 15 minutos y su resultado es exquisito.

Plato de Pat Thai en Kao Shan Road.

Los mercados callejeros son todo un hallazgo. Los tailandeses hacen pintxos y brochetas de casi cualquier cosa: salchichas de tipos y formas variados, pollo, langostinos, calamar, tofu…aderezados con salsas picantes o muy picantes y todos ellos muy apetecibles y ricos.

También se puede encontrar trozos de pollo frito, bolitas rellenas de calamar, tortilla de marisco, creps, sushi, pescado a la parrilla, y arroz y noodles combinados con verduras, pollo, cerdo o calamar. 

Pintxos y brochetas de pollo en Ayyuthaya.

Puesto de comida en el mercado nocturno del sábado en Chaing Mai.


Elaboración de una tortilla de marisco.


Bolitas rellenas de calamar.

Todos estos manjares están a disposición de ciudadanos locales y extranjeros, es el alimento diario de los tailandeses, acostumbrados a comer en la calle y a cocinar muy poco en casa. Luego también, destinado casi exclusivamente a los turistas, están los puestos de cucarachas, escarabajos, saltamontes, gusanos, larvas y escorpiones fritos. Una excentricidad que se queda para el objetivo de las cámaras de fotos, aunque cobren incluso por disparar el flash. 



Para finalizar este pequeño apunte sobre la gastronomía tailandesa, os dejo un vídeo que ilustra muy bien cómo a primera hora de la mañana, en una acera de cualquier calle de Bangkok, surge un mercado donde poder desayunar tostadas, buñuelos, fruta o un pastel, y comprar un plato de arroz con huevo frito y pollo, o una ensalada, o un sandwich, o una sopa, o cualquier cosa que se nos pueda ocurrir. Y todo recién hecho y delicioso, tanto que no sabes qué elegir y harás un esfuerzo por volver al día siguiente, aunque sea madrugando, para intentar probarlo todo.